El Rockefeller Center es una ciudad dentro de la propia ciudad: construido en plena Gran Depresión por uno de los magnates de la familia Rockefeller con la idea de convertirlo en distrito financiero y hacerle la competencia a Wall Street, este conjunto de 19 edificios está declarado Monumento Nacional desde 1987.

Escultura de Atlas en el Rockefeller Center.
Fotografía: Diana Robinson
Con la ruptura económica de los años treinta, el Rockefeller Center se vio obligado a reorientar sus funciones, convirtiéndose, además de en zona de oficinas para los medios de comunicación emergentes como la televisión y la radio, en espacio para el ocio y las compras de lujo.
Qué ver en el Rockefeller Center
- El famoso 30 Rock, el edificio principal de la NBC (National Broadcasting Company) y General Electric, y su mirador Top of the Rock, desde el que se obtiene una buena panorámica del Midtown y del Empire State Building.

Mirador Top of the Rock del Rockefeller Center.
Fotografía: Supermac1961
- El Bank of America Building, que durante décadas albergó a varias agencias de prensa.
- El Radio City Music Hall, uno de los templos del teatro más conocidos de Nueva York.
Si viajáis a Nueva York en Navidades, el Rockefeller Center es una visita obligada: a los pies del 30 Rock se coloca todos los años el gran árbol de Navidad que hemos visto en cientos de películas ambientadas en Nueva York, el más grande de Estados Unidos.
Además, durante el invierno encontraremos en la Lower Plaza del Rockefeller Center la pista de hielo en la que vemos patinar a los neoyorquinos en el cine.

La famosa pista de patinaje del Rockefeller Center.
Fotografía: Jeff Pearce
Por otra parte, en el Rockefeller Center se ubican algunas de las tiendas más lujosas de la ciudad, sobre todo por la parte de la entrada al complejo desde la Quinta Avenida, que desemboca en el paseo conocido como Channel Gardens, un jardín con esculturas de bronce de Rene Chambellan.
Desde luego, merece la pena visitar el complejo por su espléndida arquitectura, que conecta mediante túneles subterráneos todos los edificios, en los que destaca su estilo art déco y sus reconocibles fachadas.